En abril del corriente año la Cámara del Crimen de la ciudad de Bell Ville procesó finalmente a Gerardo Luis Gette (58), acusado de asesinar al médico Daniel Casermeiro (61) el 19 de diciembre de 2019, en un campo cercano a Estación Luxardo.
La fiscalía a cargo de Bernardo Alberione tenía todos los elementos necesarios para resolver la elevación a juicio.
Sin embargo, en las últimas horas el andar de la causa se frenó y el expediente volvió al Juzgado de Control ante la falta de una prueba de ADN que la fiscalía desestimó de realizar, pero que para la defensa del único imputado (por homicidio calificado) puede llegar a ser clave.
La prueba en cuestión es un análisis de ADN sobre posibles rastros de células epiteliales que podrían haber quedado en el volante y la empuñadura de la palanca de cambios del automóvil del médico, el cual apareció abandonado en un descampado a unos kilómetros donde ocurrió el homicidio.
Desde el entorno de Alberione remarcaron que quedaba este peritaje por hacer pero consideraban que no iba a cambiar lo ya decidido debido a que la prisión preventiva, en base a las pruebas recabadas, fue confirmada por el Juzgado de Control y la Cámara de Acusación de Bell Ville.
Nota completa en El Periódico de San Francisco