Este miércoles 14 vence el plazo establecido por la Justicia para que los partidos que participarán en las próximas elecciones legislativas inscriban sus frentes y alianzas electorales.
De esa manera, el mapa político que signará la realidad argentina en la segunda mitad del 2021 empezará a quedar delimitado. Al menos, en sus trazos más gruesos.
Si bien nada de lo que suceda de aquí a mediados de la próxima semana será definitivo, la inscripción de alianzas despejará algunas dudas respecto a los posibles entrecruzamientos partidarios que, hasta horas antes de dicha inscripción, mantendrá en vilo a la arena política de todo el país.
En Córdoba, los tres grandes frentes electorales confirmarán el escenario de disputa, mientras que por fuera de dichas megaestructuras, las fuerzas más pequeñas pugnarán por la creación de armados políticos que logren vencer la hegemonía política que, de antemano, se augura para tierras mediterráneas.
Peronismo
Fue el propio gobernador Juan Schiaretti el que oficializó a legisladores y referentes políticos la decisión que desde hace años viene marcando la estrategia electoral del peronismo cordobés. Hacemos por Córdoba competirá en las elecciones de medio término con su propia lista de candidatos, respetando los acuerdos que dieron origen a la versión schiarettista de Unión por Córdoba y que, en las últimas horas, sumó aliados desde el sector identificado con la iglesia evangélica.
Los evangelistas serán formalmente integrados por primera vez al oficialismo provincial que tiene como uno de sus baluartes históricos a la Democracia Cristiana.
La principal impulsora de la nueva incorporación del schiarettismo es Alejandra Vigo, segura candidata a senadora desde la boleta de Hacemos por Córdoba, desde donde dirimirá suerte con quien aparece, desde el escenario actual, como su principal contrincante: Carlos Caserio.
En el Frente de Todos, las divisiones internas serán sólo parte de la discusión por la conformación de las listas.
Juntos por el Cambio
El radicalismo cerrará un acuerdo interno respecto a su participación en Juntos por el Cambio. En el Congreso partidario, comenzaron a conversar las condiciones en torno a la forma en que las autoridades del partido centenario negociarán espacios con sus socios del PRO, la Coalición Cívica y el juecismo.
Con Luis Juez y Gustavo Santos moviéndose como candidatos oficializados, todos los caminos conducen a las Paso.
En la UCR no descartan la posibilidad de llegar a un acuerdo para evitar en confrontamiento interno abierto y unificar posturas respecto a las listas, pero el principal problema es que una de las posturas con menos margen de negociación está en la necesidad que tienen los radicales de encabezar algunos de los tramos de las boletas. Para eso, hay dos nombres para un solo lugar: Ramón Mestre y Rodrigo De Loredo.
Fuente y nota completa en La Mañana de Córdoba