La guerra entre Rusia y Ucrania arrancó su tercer mes con muchas más demostraciones políticas y diplomáticas que acciones militares.
La iniciativa política la tomó Estados Unidos luego de la visita a Kiev, del secretario de Estado, Antony Blinken, y del jefe del Pentágono, Lloyd Austin, quien aventuró que Ucrania puede ganar la guerra si cuenta con el «equipamiento adecuado».
Por otro lado, en las elecciones generales en Francia el presidente Emmanuel Macron obtuvo una trabajosa reelección que fue comentada por sus pares ruso, Vladimir Putin, y ucraniano, Volodimir Zelenski, cada uno en su tono y con la dirección política que pretendió darle.
En el plano de los combates, sólo trascendieron públicamente un par de episodios: Rusia derribó dos drones ucranianos cerca de la frontera, mientras la compañía nuclear ucraniana Energoatom acusó a Moscú de lanzar dos misiles de crucero contra los alrededores de una central nuclear.
Fuente: Télam