Las lluvias que cayeron durante los últimos días, y que llegaron a acumular hasta 115 milímetros en algunas zonas del centro y sur de Buenos Aires y La Pampa, trajeron el alivio que esperaba una campaña triguera muy castigada por la falta de agua.
Informe Bolsa de Cereales de Buenos Aires
Hasta la semana pasada, casi la mitad de los lotes (44%) ya emergidos, mostraban una condición hídrica entre regular y sequía, cifra que se redujo al 35% tras las precipitaciones mencionadas.
La clave es que en las regiones mencionadas se siembra casi el 40% del trigo del país, y por eso estas lluvias tienen impacto a nivel general en los números del cereal.
A la fecha, se lleva implantada el 98,8% de la superficie prevista, por lo que la siembra del cereal culminaría durante la próxima semana.
Fuente: Infocampo