En una conferencia realizada el 2 de febrero de 1971 en la ciudad iraní de Ramsar, a orillas del mar Caspio, dieciocho naciones firmaron un tratado intergubernamental para la acción nacional y la cooperación internacional en la conservación y el uso racional de los humedales y sus recursos.
Denominado “Convención relativa a los Humedales de Importancia Internacional, especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas”, fue el primero de los tratados modernos de carácter intergubernamental sobre conservación y uso sostenible de los recursos naturales. Su firma se recuerda, y celebra, cada 2 de febrero.
¿Qué son los humedales?
Se trata de áreas saturadas o inundadas de agua de manera permanente o estacional -pantanos, turberas, esteros, ríos, lagos marismas, manglares, praderas de pastos marinos, arrecifes de coral-, cuya profundidad en marea baja no excede los seis metros. También son existen humedales artificiales como estanques de tratamiento de aguas residuales y embalses. En todos los casos el agua es el regulador principal que determina el tipo de comunidad biológica que lo habita.
Numerosas especies vegetales y animales, y también las personas, dependen de estos ecosistemas para vivir. Su existencia es una contribución fundamental a la salud y el bienestar humano. Además, en las lagunas y llanuras de inundación donde se encuentran densas formaciones vegetales, como los lechos de juncáceas, también actúan como barreras físicas que frenan el agua y retienen los sedimentos, aumentando la fertilidad y productividad natural de las llanuras inundables y contribuyendo a mejorar la calidad del agua. Los ecosistemas de humedales representan muestras significativas de abundancia y diversidad de recursos naturales de los que