La ONU lanzó en las últimas horas, un llamado a hacer donaciones para enfrentar las «inmensas necesidades» de millones de personas sin vivienda ni alimentos tras el terremoto que sembró destrucción en Turquía y Siria y dejó casi 40.000 muertos.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, exhortó a los Estados miembros del organismo a aportar «sin demora» 397 millones de dólares para asegurar «una ayuda humanitaria que necesitan desesperadamente casi cinco millones de sirios», empezando por «refugio, atención médica y alimentos».
En lo inmediato harán un llamamiento similar para ayudar a Turquía.
«Las necesidades son inmensas» y «sabemos que la ayuda para salvar vidas no está llegando a la velocidad y escala necesarias».
«Una semana después de los devastadores sismos, millones de personas en la región luchan por sobrevivir, sin hogar y bajo temperaturas glaciales».
La última cifra de personas muertas era de 39.106, de los cuales 35.418 son en Turquía y 3.688 en Siria.
La ONU anticipó que las cifras aumentarían fuertemente.